allí como un clavo iij

.


parecería que una aparición tan frágil
debiera indefectiblemente volver al caos del q ha salido.
los asaltos destructores que aguanta
no aportan a su ser gratuito más que imperceptibles modificaciones.
la multiplicación de esos asaltos la inmuniza y la protege.
se presta y se acostumbra a ella.
su autonomía y su identidad
proceden incluso de un suplicio semejante,
a condición de que sea ilimitado.




la presencia no es presencia mas que a distancia
y esa distancia es absoluta, irreductible, infinita.

abrir en el espacio del mundo el intervalo infinito
a partir del cual hay presencia
-para nosotros, pero como sin nosotros.




nos atrae invisiblemente
hacia ese punto, punto único, donde la cosa presente
se trueca en la pura presencia,
presencia de lo Otro en su extrañeza;
es decir, así mismo radical no-presencia.




esta distancia el vacio


.

No hay comentarios:

Publicar un comentario